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14001

Interpretación de la norma ISO 14001 2015

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ISO 14001

El cuidado ambiental ha crecido notablemente respecto a la consciencia empresarial. Ha evolucionado desde su configuración como un término lejano a considerarse en muchas organizaciones como un aspecto estratégico.

Con ello, las empresas desean que su presente y futuro este basado en un desarrollo sostenible y por ello se certifican en ISO 14001.

La ISO 14001 es una de las normas más populares mundialmente para llevar a cabo una correcta gestión ambiental.

Esta norma está adaptada y ha sido revisada y renovada para proporcionar soluciones a los desafíos actuales.

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La nueva versión de la ISO 14001 aporta relevancia económica, social y ecológica a partir de aquellas organizaciones donde esta implementada. Por esta razón es verdaderamente importante interpretar correctamente cada uno de los requisitos de la norma ISO 14001.

Se trata de un estándar que ofrece la implementación de un Sistema de Gestión Ambiental ayudando a pequeñas, medianas y grandes empresas. Esta ayuda está orientada al control a través de la minimización o eliminación de los posibles impactos que producen las actividades en el medio ambiente. De esta forma se logrará que las organizaciones sean mucho más sostenibles, favoreciendo el desarrollo de tecnologías limpias. Así como mejorando el uso de los distintos aspectos ambientales y el cumplimiento de la legislación actual.

Con este propósito, la ISO 14001 incorpora el Anexo A. Dicho anexo aborda toda la información en referencia a los requisitos que determina la propia ISO 14001. Estos requisitos deben ser considerados desde una perspectiva sistemática u holística.

 

Anexo A

Dentro de la información recogida en el Anexo A pueden incluirse determinados aspectos. Algunos de estos son:

El objetivo del apartado 4.1 de la ISO 14001 es ofrecer una comprensión global y conceptual sobre los puntos más relevantes que puedan afectar, tanto positiva como negativamente, a la forma en la que la organización gestiona sus responsabilidad ambientales.

Estos puntos con las cuestiones relevantes para la organización, los conflictos para discutir y debatir cada una de las circunstancias cambiantes que tiene repercusión sobre la capacidad de la organización para lograr los resultados previstos.

Entre los puntos internos y externos al contexto de la organización encontramos:

  • Las condiciones ambientales relacionadas con el clima, calidad del aire, calidad del agua, utilización del suelo, contaminación existente, disponibilidad de los recursos naturales y biodiversidad. Estos pueden afectar al objetivo de la organización o ser afectadas por los aspectos ambientales.
  • El contexto cultural, social, político, legal, reglamentario, tecnológico, financiero, económico, natural y competitivo.
  • Las características o condiciones internas de la organización, como las actividades, productos y servicios, cultura y capacidades.

El objetivo final que se pretende alcanzar con la compresión del contexto de la organización es el de establecer, implantar, mantener y mejorar de manera continua el Sistema de Gestión Ambiental.

 

Partes interesadas

Tanto los puntos internos como externos que se determinan en este análisis ponen de manifiesto distintos riesgos y oportunidades para la organización o para el Sistema de Gestión Ambiental. La propia empresa debe ser la encargada de establecer cuáles son necesarias abordar y gestionar y cuáles no.

Se espera que una organización logre una comprensión general tanto de las necesidades como de las expectativas requeridas por las partes interesadas, tanto internas como externas, fijadas por la organización. Se considera que el conocimiento ha sido adquirido cuando se determina qué necesidades y qué expectativas se han decidido satisfacer.

Los distintos requisitos de las partes interesadas no son necesariamente requisitos de la organización.

Algunos de estos requisitos de las partes interesadas ponen de relieve distintas necesidades y expectativas de carácter obligatorio. Generalmente éstas se han incluido a través de leyes, reglamentos, permisos, licencias gubernamentales o incluso sentencias.

Las organizaciones pueden decidir aceptar o adoptar voluntariamente otros de los requisitos de las partes interesadas. Llegado el momento en el que la organización los adopte, estos pasan a ser requisitos de la organización, y deben considerarse en la planificación del Sistema de Gestión Ambiental.

 

Responsabilidades

Para manifestar el liderazgo y compromiso podemos encontrar responsabilidades concretas relacionadas con el Sistema de Gestión Ambiental en las que la alta dirección debe de estar involucrada personalmente.

La alta dirección puede encomendar la responsabilidad de dichas acciones a otras personas. Aun así debe mantener la responsabilidad y obligación de garantizar que las acciones se realizan.

Dentro de las responsabilidades de la alta dirección encontramos la política ambiental. Está formada por un conjunto de principios establecidos como compromisos. En estos, la alta dirección debe determinar los objetivos de la empresa para apoyar y mejorar su desempeño ambiental.

La política ambiental favorece que la organización establezca su objetivo ambiental y realice determinadas acciones para alcanzar los resultados previstos del Sistema de Gestión Ambiental permitiendo la mejora continua.

 

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Tanto las organizaciones pequeñas como las de mayor tamaño confían en los beneficios que les ofrece el Software ISOTools para la gestión, supervisión y desarrollo de su Sistema de Gestión Ambiental basado en la norma ISO 14001. Esta herramienta permite y facilita el control del sistema de gestión asegurando la obtención de óptimos beneficios.

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